Ese precioso anillo de cóctel que era para morirse se ha vuelto verde en tu dedo. Puede que ya no te guste tanto. Pero que no cunda el pánico, a mucha gente le ha pasado lo mismo. Una vez que determines la causa, puede que encuentres una solución. Entonces podrás volver a amar ese anillo tanto como antes. Lo más probable es que sólo se trate de ciencia y que se haya producido una reacción química inusual. Aquí tienes 4 de las razones más comunes por las que tu piel se vuelve verde debido a las joyas, el oro y otros metales.
1. Oxidación: El cobre y el níquel son metales que se oxidan cuando se exponen al oxígeno. La reacción química de oxidación crea un residuo en el metal que puede transferirse a la piel y volverla de un precioso tono verde. Aunque pueda parecer horrible, la decoloración no indica nada perjudicial para la salud. Ambos metales son aleaciones comunes mezcladas con oro y plata.
2. Solubilidad: Otra reacción que puede tener lugar entre la piel y los metales es la solubilidad. Esto ocurre cuando ciertas secreciones cutáneas de sustancias químicas solubles empiezan a disolver partículas diminutas dentro del metal. El sudor contiene una serie de sustancias químicas. Las que más pueden contribuir a que su dedo se vuelva verde son el cloruro sódico (sal) y el ácido láctico. Al disolverse, las partículas de cobre y níquel son absorbidas por la piel, tiñéndola de azul o verde.
3. Corrosión: El cloro es muy corrosivo para los metales. La exposición al cloro de las piscinas o de los productos de limpieza domésticos no sólo provocará una reacción que volverá verde su piel, sino que también podría cambiar el color de su anillo. Será necesario que un joyero lo limpie y pula profesionalmente para devolverle su antiguo esplendor.
4. Reacción azufre/aminoácido: Ciertos medicamentos aumentan la producción de azufre y aminoácidos. Cuando una persona transpira, estas sustancias químicas están presentes en la piel. Reaccionarán con metales como el cobre y el níquel, dejando tras de sí una mancha verde en la piel y un oscurecimiento del metal. La reacción se produce con mayor frecuencia en personas sometidas a quimioterapia o tratamiento con antibióticos. También existen determinados tratamientos tópicos que contienen azufre, como champús o cremas a base de azufre.
No sólo joyería barata: Como el oro y la plata puros son metales muy blandos, en joyería fina es habitual añadir aleaciones más fuertes. Los joyeros también construyen diseños con un metal más denso atómicamente y luego lo bañan en oro. Con el tiempo, este baño se desgasta y deja al descubierto el metal interior que entra en contacto directo con la piel.
Consejos para evitar el verde: Aunque una persona adquiera una costosa pieza de joyería de oro o plata de 14k/10k, estos preciados metales pueden plantear problemas potenciales de decoloración de la piel. Si usted es una de las personas más sensibles a las aleaciones metálicas más utilizadas, como el cobre o el níquel, puede disfrutar de su anillo sin ponerse verde. He aquí algunos consejos para minimizar las reacciones más comunes en la piel:
- Aplica una capa de esmalte de uñas transparente en el interior del anillo, creando una barrera entre tu piel y el metal. Repite la operación si es necesario.
- Mantenga la piel seca. No lleves joyas cuando nades o te bañes. Quítate los anillos para lavarte las manos y sécate bien la piel antes de volver a ponértelos.
- No te pongas loción en los dedos anulares.
- No lleves joyas durante los entrenamientos u otras actividades que provoquen una sudoración intensa.
- Quítese las joyas cuando utilice productos de limpieza domésticos que contengan lejía o póngase guantes impermeables.
Alternativas al oro y la plata: Si experimenta reacciones más graves, como erupciones rojas con picor, es posible que sea demasiado sensible para disfrutar de joyas fabricadas con aleaciones metálicas como el cobre o el níquel. En estos casos, las joyas de platino, rodio o acero inoxidable son opciones más adecuadas.
¿Qué ocurre si una persona tiene una preciosa colección de joyas de oro que descubre que no puede disfrutar? ¿Por qué no vender a un comprador de oro que también se dedique a la joyería fina elaborada con metales como el platino? Es una solución beneficiosa para todos. Visite un joyero profesional si desea más información sobre cómo vender oro o consultar colecciones de joyas fabricadas con metales que no le pondrán la piel verde.